¿Ayudará EE.UU. a Filipinas a hacer frente al matón del barrio?

Por Grant Newsham

Taiwán, Ucrania y Gaza acaparan la mayor parte de la atención en estos días. Pero la reputación de Estados Unidos como un aliado confiable está en juego en ningún lugar más que en Filipinas.

Y esa reputación está a punto de irse por el desagüe.

El 17 de junio se produjo el esfuerzo más reciente y violento de la Guardia Costera de China (CCG) para impedir que Filipinas reabasteciera al BNP Sierra Madre, un viejo buque de la armada encallado deliberadamente en Second Thomas Shoal y tripulado por un destacamento de marineros e infantes de marina con el fin de afirmar el control filipino del bajío.

Esto no debería ser necesario, ya que Second Thomas Shoal se encuentra dentro de la Zona Económica Exclusiva (ZEE) de Filipinas.

Sin embargo, China reclama la propiedad y ha estado interfiriendo con los esfuerzos de reabastecimiento de la Guardia Costera y la Armada de Filipinas con una fuerza cada vez mayor.

Esta vez, blandiendo cuchillos, hachas y lanzas, lanzando láseres intermitentes y usando armas de sonido, y embistiendo y remolcando barcos filipinos superados en número, los chinos hirieron gravemente a un marinero filipino y dañaron y se apoderaron de barcos filipinos y robaron propiedades.

Las versiones difieren en cuanto a si un barco filipino se escabulló.

De todos modos, este fue el esfuerzo chino más violento hasta la fecha.

¿Se intensificarán los enfrentamientos entre la Guardia Costera de China y las fuerzas filipinas?

Sí. Los chinos han dejado claro lo que pretenden hacer con  el territorio marítimo filipino que codician: dominar, controlar y, si es necesario, apoderarse y ocupar, y hacer imposible que sus víctimas más pequeñas y superadas puedan recuperarlo.

Este es el patrón que han utilizado en todo el Mar de China Meridional. Y están dispuestos a usar la fuerza para salirse con la suya.

Estos enfrentamientos continuarán hasta que Filipinas retroceda (se rinda) o Estados Unidos intervenga, y cumpla con sus compromisos con sus aliados filipinos.

Además, tenga en cuenta que no solo la Guardia Costera de China está activa en territorio filipino. La Milicia Marítima de las Fuerzas Armadas Populares también está operando en conjunto con CCG, al igual que la flota pesquera china "regular". Y la PLAN (Armada China) siempre está cerca.

A nadie le gusta admitirlo, pero la RPC utilizó su ventaja numérica y sus bases insulares artificiales para establecer el control de facto del Mar de China Meridional hace al menos siete u ocho años. Su agarre sigue apretándose.

¿Qué sigue?

Esto está llegando a un punto crítico. Filipinas no está en condiciones de resistir la fuerza china mucho mayor que está desplegada en Second Thomas Shoal, y que puede aumentarse a voluntad.

A menos que Manila acepte un acuerdo humillante con la República Popular China para renunciar al control final del Segundo Banco de Arena Thomas a cambio del permiso chino para reabastecer el barco encallado de Filipinas, Filipinas eventualmente tendrá que evacuar el destacamento a bordo del BNP Sierra Madre.