Osanin Diaz, motor de la capacitación de árbitros Hispanos en OKC

Redacción local

Se trata de un proyecto que tiene por objetivo incentivar, divulgar y promover entre los hispanos una las profesiones más complicadas en el mundo del deporte: ser árbitro de futbol.

El motor que lo impulsa es Osanin Díaz, un hondureño que cuando hizo su maleta para emigrar a la Unión Americana empacó consigo la pasión por el arbitraje y el sueño de divulgarlo.

A tres años y medio de llegar a esta ciudad, Osanin ya ve reflejado el fruto de su esfuerzo a grado tal que ya fundó una sociedad de árbitros y comenzará la capacitación gratuita de otros tantos.

La misión de esta labor, la cual comenzó este mes, es la de consolidar a un grupo que eleve el nivel del arbitraje en las ligas locales y sea un semillero para que en el futuro represente a Oklahoma a nivel nacional.

Las labores para llegar a esto se estarán realizando en el Soccer Goal Complex, ubicado en la Southwest 29 y Utah, los miércoles a las seis y media de la tarde.

Se trata de una capacitación totalmente gratuita que dura una hora,

integradas por 25 minutos de teoría, 20 de práctica y una charla final de concentración.

UNA PASIÓN SIN FRONTERAS

Osanin Diaz se traslado de Honduras a Estados Unidos en 2018 a iniciativa de su familia.

En su tierra natal comenzó la pasión por el futbol. Como todos, comenzó jugándolo aunque el destino terminaría por ubicarlo fungiendo como el personaje en el campo del juego que muchos no quieren ser: el árbitro.

“Empecé a arbitrar desde los 18 años. Yo jugaba y entrenaba niños. Fue entonces que el entrenador principal del equipo, el profesor Eldín Hernández, me pidió que lo ayudara a arbitrar”.

Era la época en que colaboraba en el Real Vista Buena, conocido como Arenera, en Honduras.

La idea no le gustó de inicio a Osanin, pero “el profe” lo convenció:

“Empecé a tomar cursos para ser árbitro. A los 19 años ascendí a la rama semiprofesional o liga de ascenso de Honduras, me faltó poco para llegar a primera división”, narra Diaz.

La falta de influencias le impidió llegar al máximo nivel en la liga catracha, pero no apagó la vocación que trajo consigo a Oklahoma.

“Un día fui a ver jugar a mis hermano en la Liga Latina (LASLO1) y vi que tenían muy mal nivel. Pedí una oportunidad, y cuando me vieron, me pidieron que me quedara”, recuerda Diaz.

Osanin poco a poco se relacionó y tuvo un ascenso meteórico, el cual le pedirte afirmar: “Soy ya un árbitro USSF, o sea, semiprofesional. Trabajo para una academia grande y llegan a contratarme para partidos de eventos con gran difusión”.

Entre otros, ha contado con el apoyo de Edwin Zunum y de la Academia Terranova.

“Nos han dado el apoyo para poder tener una sociedad de árbitros, la cual nombramos Arbitros Asociados de Oklahoma”.

El American Dream de Diaz ya le permitió conocer y compartir vestidor con árbitros profesionales de México, El Salvador y Honduras.

POR MÁS ÁRBITROS HISPANOS

Pese a lo bien que le va, Osanin no olvida lo importante que es la base y que eso incluye capacitar a más árbitros hispanos.

“El nivel en las ligas de niños y aficionados está muy mal llevado. Hay gente que sólo lo ve como negocio y no como una vocación. No lo toman en serio”.

“Ahora, en la Arbitros Asociados de Oklahoma, ya tenemos 29 árbitros, hacemos clínicas para ayudarles a mejorar su nivel, sobre todo enfocado en la población latina”.

Y agrega: “La gente latina tiene temor de entrarle porque no hablan inglés y porque en las ligas de hispanos se dan competencias mucho más apasionadas y complicadas de dirigir”.

Con satisfacción Diaz concluye: “ya hemos llegado a un nuevo nicho con árbitros muy jóvenes y que nos permitirán llevar a representar a Oklahoma en torneos a nivel nacional”.